Entre perros verdes

Los militares por su formación, no son ni serán jamás democráticos, estos están entrenados para ser perros fieles que nunca cuestionan a su superior y cuya respuesta ante quien disienta o cuestione sus ordenes esta signada por el inmediato castigo de la naturaleza que se les ocurra para penar la falta, por supuesto el militar que unos cuantos venezolanos (de los cuales quiero pensar actúan sin maldad y desde la convicción de que así saldremos de la mierda en que estamos hundidos)eligieron en unas supuestas elecciones limpias, pero que la imposibilidad de auditar deja serias dudas de que lo sean, por supuesto que este señor no escapa de la condición autoritaria de quien por su oficio parásita dentro de los cuarteles, y desde unos años para acá ha ido de a poco apretando la censura e invadiendo todos los resquicios de la vida publica con miedos y amenazas por todos lados, llegando incluso a dominar de tal manera el aparato de justicia para que este funcione solamente bajo sus caprichos, llenando los tribunales con lacayos incondicionales, quienes solo ejecutan sus ordenes retorciendo leyes y constituciones con la esperanza de que algo de la gran torta “roboilusionaria” les toque como premio a su esfuerzo por sus bajezas.
Vivimos en un país donde el jalabolismo es tan grande que un ministro llega al absurdo de ordenar una rueda de prensa para decir que la escasez no es tal, que lo que sucede es que los venezolanos ahora somos millonarios y que la oferta ha rebasado a la demanda por tanto efectivo circulando en la calle, o aquel otro que aseguro al aire que los llamados ajustes de cuentas donde los balandros mueren, no pueden ser contados como homicidios violentos, pues no son atracos, señores, por dios que esta pasando , estamos pasando la frontera surreal y pareciera que estamos drogados y alucinados, que eso no sucede en ninguna parte donde la cordura exista.
Pronto comenzaran a perder las formas y se empezaran a ver en algún que otro noticiero que por arte de magia van a ir desapareciendo los señores que les son incómodos al régimen, ya cerraron un canal solo por disentir, el régimen se acaba de quitar la mascara democrática para ir por la calle del medio con sus tropelías, acabando todo eso que huela a disidencia, ya comenzaran los grupos radicales a invadir las universidades con su carga de violencia, para que el gobierno tenga la excusa de violar la autonomía universitaria y reordenar las matrices curriculares de forma tal que el adoctrinamiento entre por la puerta grande, ya se escucharan de radioemisoras que cierran y de autocensura o de teléfonos intervenidos para que nadie escape de la vigilancia y tal como dicen algunas religiones estemos manchados por el pecado original de pensar , entonces se presenta la duda, huir a otro país , pelear por este o simplemente sentarnos a mirar como todo esta pisoteado y destruido por esa horda que a punta de fusil nos intenta hundir en el mar de la felicidad cubana, ya nos están arrinconando y eso no debe ser, nuestro deber para con nuestros hijos es intentar salvar este país de las manos siempre nefastas de los militares , bien lo decía Maquiavelo, “los militares por ser su oficio el de matar, nunca serán de fiar” o aquella sentencia de Bakunin quien decía que los militares no son mas que payasos que se pasan la vida con sus códigos y disfraces y con los que nadie se mete por que poseen las armas y el poder para usarlas,