Tengo
tiempo pensando, buscando una solución que nos permita dejar de tener este país
de miedos y pobrezas para volver a tener futuro, tengo que ser sincero, no veo
una salida rápida a esta crisis que en vez de suavizarse se agrava, no es solo
la escasez, es el hampa, la inflación, la pobreza y hasta la idiotez de muchos.
Es también el miedo cerval que se nota en las calles desiertas a las ocho de la
noche, el desinterés de los estudiantes que saben que la única oportunidad está
en algún aeropuerto, el desespero de nuestros viejos que saben que la pensión
no les alcanzará para comer y mucho menos para las medicinas que de todas
maneras no hay.
Como
los comunistas se sienten tan cómodos paleando mierda en vez de comer como la
gente decente, de aspirar cosas, así parezcan idiotas muchas de estas cosas, si
tu trabajas y tu esfuerzo por estudiar e instruirte te genera un sueldo lo
suficiente para comprarte un celular que de todas maneras subutilizaras pues
por qué no hacerlo, en Venezuela (solo a modo de ejemplo) hay dos razones
básicas para no comprar un Smartphone decente, la primera, son excesivamente
caros, en mi caso eso me costaría no menos de 2 años de mi sueldo de maestro la
segunda es que te estas comprando la posibilidad de un atraco sin final feliz
como tantos que se producen a diario en el país.
En
casos de aspiraciones más “serias” es más o menos lo mismo, una nevera de 11
pies cuesta 80 mil bolívares, año y algo de mi sueldo, una casa mejor no lo
digo pues la cosa pasaría de un par de siglos, un apartamento como siglo y
medio, una computadora sin muchas pretensiones pasa de los cien mil y así
sucesivamente, cuando un kilo de carne cuesta la cuarta parte una quincena la
cosa no da para mucho especular.
Ante
todo este panorama desolador, creo que debemos comenzar a hacer propuestas
reales, esa gentuza de Miraflores y sus acólitos regados por el país no van a
irse así de sencillo, tampoco la oposición tiene fuerza para obligarlos, los
militares se quedaron sin valor para enfrentar a los invasores ni exigir nada,
la comunidad internacional no hará nada y los malandros seguirán gobernando por
acá gracias al orto flexible de quienes deberían hacer cosas y prefieren seguir
chupando la teta del estado que ejercer reales presiones.
Seguramente
a muchos les espantará la solución que presento, pero la verdad no veo nada más
pues lo que nos presentan como posible salida es la misma tontería que lleva 15
años sucediéndose sin que dé resultados positivos.
Qué
tal si hacemos un gran congreso para realizar un documento que divida la nación
en dos partes, comenzaríamos de cero, es cierto, pero la verdad tampoco es que
tengamos la tarea adelantada en ningún caso, solamente el hampa ha avanzado
cualitativa y cuantitativamente en estos 15 años.
Para
un lado nos vamos la gente con ganas de progreso, que creemos en las
posibilidades que dan el trabajo y el esfuerzo, del otro se quedarían los que les
gusta vivir bajo las condiciones de sus jefes comunistas, esos que no tienen
más pensamiento que matar toda actividad productiva, que no creen en el estudio
como medida de progreso, que asumen que el progreso de un país se mide por la
cantidad de colas de gente para comprar cosas tan simples como una bombona de
gas, que mataron el arte, la cultura y la literatura, que aprovecharon los
millones del petróleo y se los robaron de manera pública y notoria sin guardar
nada para los malos tiempos, que hasta las reservas en oro se las regalaron a
los cubanos.
Creo
firmemente que muchos de los venezolanos inteligentes que se fueron cuando y
como pudieron podrían sinceramente ayudarnos a salir del atolladero y en cinco
años volveríamos a ser la nación que una vez fuimos, no importa el lado del
país que nos den, en ambos casos hay bastante de donde volver a levantar el
país y así le huimos a una guerra siempre presente en la mente de todos, del hambre
que nos pisa los talones y que en muchos casos no se instaura es gracias a que
hemos aprendido hasta a comer piedras.
Será
difícil pero no imposible, si no me creen vean el espejo de Alemania oriental y
Alemania occidental, Corea del Norte o del Sur, saquen sus conclusiones y vean
cual de los dos lados está mejor, en el caso alemán la caída del Muro de Berlin
logro unificarlos cincuenta años después, el lado comunista, miserable como
todos y el lado capitalista que era por supuesto más rico, al final Alemania es
hoy día un país que no quiere acordarse mucho de su pasado comunista, es un
trago amargo que se ha ido olvidando por el tiempo, el de los coreanos casi es
motivo de burla y tristeza para muchos, los venezolanos estamos a tiempo, toca pensar y evaluar.
Pero
esta mañana sin café y sin dinero para comprarlo a un bachaquero pues la
quincena aún está lejos, pienso que sería una solución interesante para al
final saber que los que queremos progreso no estamos tan equivocados, los otros
pues pueden disfrutar su muladar como quieran.
José
Ramón Briceño, 2015
@jbdiwancomeback
2 comentarios:
Hace cierto tiempo escribí algo parecido y esto me lo recuerda. Pero el empeño de nuestros políticos no los deja reflexionar sobre la lógica que debe existir así hagamos las comparaciones sobre Alemania; Corea u otro similar no les da la gana de verlo; por que son tan mezquinos que solo piensan en sus bolsillos
Favorablemente no hay mal que dure cien años jy pasaran a la historia como el peor gobierno en na historia del país.
Hace cierto tiempo escribí algo parecido y esto me lo recuerda. Pero el empeño de nuestros políticos no los deja reflexionar sobre la lógica que debe existir así hagamos las comparaciones sobre Alemania; Corea u otro similar no les da la gana de verlo; por que son tan mezquinos que solo piensan en sus bolsillos
Favorablemente no hay mal que dure cien años jy pasaran a la historia como el peor gobierno en na historia del país.
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