La supresión de la educación

El fulano nuevo currículo me alcanzó hoy, esta mañana estuve en la reunión del colegio donde estudia mi hija para “discutir” los cambios propuestos por la zona educativa, puse discutir entre comillas pues no solo estoy seguro que usaran lo escrito en esas reuniones para hacer papel maché por no decir que tendrán el mal gusto de reciclar para usarla como papel higiénico que está tan caro y en algunas zonas del país hasta escaso. En otras condiciones me niego a ir a esos eventos pues es convalidar las aberraciones zoocialistas , sin embargo por estar mi hija de por medio fui a ver, realmente intenté no ir con ideas preconcebidas sobre el asunto, mi ex, la madre de la niña me pidió que no fuese grosero con los funcionarios presentes si alguno hubiese, siempre me tocan las reuniones incomodas en la escuela pues no tengo reparos en discutir con nadie nada, claro, con un inmenso esfuerzo de mi parte para evitar palabrotas o actitudes malsonantes, las monjas viven en una dimensión muy diferente a la mia, comenzando por que dios no tiene la culpa de nada y ellas viven bajo el cobijo de su excusa, estas cuando menos.

Al comenzar el evento, con la explicación de los ítems a “discutir” ya la cosa me angustiaba un poco, resulta que entre los temas, en cada uno de los apartados colocan tres que realmente importan pero al cuarto es el problemático, la directora del plantel, imagino que bajo coacción e intuyendo un motín de madres  (y algunos padres como yo) molestos partiendo sillas y buscando quemar a los funcionarios jalamecates de la zona educativa , nos pidió “hacer críticas constructivas pues las otras no tenían efecto, si no teníamos nada bueno que aportar a esas propuestas pues que las dejáramos de lado” , tocó hacer un titánico ejercicio de concentración para no tirarle la silla en la que estaba sentado a la señora esa ni levantarme y mandarla a comer desechos coprológico aliñado con pupú de perro a viva voz y con la saña debida, tocaba mantener las formas pues encontrar colegio es más complicado que un cupo en la universidad.

Seguramente los lectores venezolanos han estado en situaciones similares, lo peor es la indiferencia de muchos padres y representantes, la sala estaba a medio llenar y teóricamente debían estar representados allí los dos turnos, cuando en cada turno hay por lo menos 350 niñas , pero no creo que llegásemos a 300 padres allí reunidos, menos del 50% del total. De paso ningún epresentante tuvo voz no voto en la discusión, las maestras encargadas de la organización solo se remitieron a agrupar a los padres por tema y a recabar los datos que generaría cada discusión grupal, solicitando de paso que una vez entregado el documento se retirasen del plantel, nada de discusiones, ni de controversias, menos aún argumentos pues no les eran “cómodos”, ¿Qué carajo de discusión es esa? ¿Cómo es eso que me piden que adorne lo que me piden pero sin chistar ni proponer acciones en contra? ¿Si eso fue en un colegio privado, como sería en los guetos chavistas de la educación pública?

Padres, madres, representantes ¿ustedes de verdad van a dejarnos solos a los que disentimos por sentirse cómodos en sus empleos y casas? ¿Qué van a alegar cuando el futuro los alcance?. Hay muchas preguntas sin respuesta, la única es que quieren hacer a cualquier precio modificaciones sin sentido con excusas pueriles, cuando saben de sobra que las respuestas están allí, no creo que todo ese esfuerzo sea para bien de la comunidad, es que buscan desesperadamente organizar alguna suerte de infiltración legal, eso de integrar a los obreros y administrativos en el proceso educativo no es más que un eufemismo para designar esbirros enquistados dentro de los planteles, no me malinterpreten, la verdad no tengo nada en contra del personal obrero no del administrativo pero hasta donde se ellos no han estudiado para profesor o maestro, no han invertido años en formarse y por tanto no tienen ni la calificación y mucho menos la experiencia para inmiscuirse en el proceso educativo, ellos tienen una labor importante y sin ellos nada funcionaria, entonces limítense a ser efectivos en su trabajo y así colaborarían bastante, otra cosa, los consejos educativos tampoco tienen vela en ese entierro, mucho menos esa figura absurda del gobierno estudiantil que si bien vale para la universidad , para la educación básica no pues todos los docentes sabemos que los jóvenes andan en otra cosa y no es precisamente organizar sus escuelas.

Los concejos educativos y los comunales que el estado quiere atornillar dentro de los institutos educativos tampoco tienen ni la calificación ni la formación más allá del faramallerismo con que usualmente se comportan los esbirros disfrazados de gente que hacen vida política bajo el manto estatal, además imagino que si tienen tiempo para estar de cabeza en las escuelas es porque no trabajan en nada y toca ser consecuente con las miserias que llaman becas o misiones y así obtener cuando menos la cuota de poder que su escaso cerebro y mayor flojera les ha permitido la vida.

Como abran podido intuir ando muy molesto con la situación, aunque la verdad más que molesto preocupado, ya mi país está flotando en una pobreza intelectual y material grave, el futuro no se mira muy claro, los jóvenes que piensan ahora van presos y a los que se van formando los quieren adoctrinar para evitarse el mal trago de tener una verdadera juventud rebelde, uno como padre preocupado se debate entre dejar hacer al estado y tener a los hijos pobres pero libres entre los parámetros de estos barbaros de la imbecilidad o educarlos críticos pero con eso le aseguramos una vida menos cómoda intelectualmente, quien quita si hasta problemática pues recordemos que el concepto “revolucionario” de democracia está forjado desde un precepto que solo ellos entienden llamado “mandar obedeciendo” que suena así como tu eres libre siempre y cuando seas un borrego más del rebaño sin discusiones ni disensiones, de otra pues cárcel y mendicidad.

José Ramón Briceño, 2014

@jbdiwancomeback