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martes, marzo 22, 2016

Semana Santa



Esta semana santa me ha dado por pensar sobre la situación actual buscándole una explicación lógica a lo ilógico del desmadre global en el que vivimos , total, no tengo dinero para hacer nada más que escribir, releer libros viejos y quizás hacer una que otra foto, eso sí, escondido pues mi cámara sin ser la gran cosa además de ser la única que tengo, si me la roban tocará meterme a narcotraficante para poder comprar otra o comenzar desde ya a llorar a ver cuántos lectores se conduelen y me compran libros o fotos para reunir en dólares y comprar una igual a la robada. 

Pero a lo que voy, es muy normal que entre la comunidad intelectual se niegue la existencia de dios, la verdad yo soy de esos, aunque tengo algunas creencias espirituales un tanto particulares de las que no hablaré, también soy de los que piensan que los libros sagrados nos meten gato por liebre, además, el hecho de que esté escrito no quiere decir en ningún caso que sea la verdad absoluta, ni que necesariamente el carbono 14 sea garantía de autenticidad, en  caso tal si todo fuese cierto y el equivocado soy yo , deberíamos suicidarnos en masa y así irnos de una buena vez al paraíso, le dejamos este planetucho a la gentuza fanática y listo, nos salvamos en lotes.

Pongamos que la cosa es cierta, que Jesús no fue uno más de los millones de crucificados por los Romanos y en serio la cosa fue que el pobre maestro, iluminado, revividor de muertos, curador de leprosos, multiplicador de panes y peces e hijo del mismo Dios Padre en persona, fue crucificado como una suerte de lección para que los humanos cogieran mínimo y nos calásemos la desventura de vivir en este plano hasta que el cuerpo quisiera, para poder subir hasta el paraíso donde el alma inmortal se morirá de aburrimiento , sin sexo, Drogas , alcohol y algunas otras cosas divertidas de ser humano.

Pongamos que estas fechas tienen razón de ser para recordar el sufrimiento de aquel pobre semidiós que subió a los cielos en una fecha más o menos aproximada a esta hace más de dos mil años, allá en Jerusalén.
Viendo en perspectiva hay un par de detalles que me hacen pensar, en primer caso si el padre mega todo poderoso acabó el mundo con una inundación por qué le pareció que solamente funcionaban como humanos Noé y familia condenándonos todos a ser genéticamente similares pues necesariamente hubo de existir incesto, sumado claro al de los descendientes de Adán y Eva, tiempo después del diluvio quema hasta los cimientos un par de ciudades (por lo menos su ira se hizo más local)  solo porque ahí habían homosexuales y prostitutas que a fin de cuentas no son la gran plaga , ahora muchos son estrellas de cine y tv. ¿Solo a mí me parece extraño que un fulano tan vengador y de mal genio haya sacrificado a su hijo para dar una lección que nadie aprendió? ¿No le sería más fácil tirar un par de meteoros y hacernos retroceder hasta las cavernas? Así se saca todas las cuentas que debemos tener con él por el solo hecho de respirar.

Ayer mientras volvía a mi guarida,  rodando por la carretera panamericana veo por la ventana todo es gris, mucho humo flotaba en el aire, había (hay) mucho calor, todos andamos aprehensivos pues en teoría llegará el momento donde no habrá electricidad, sin hablar del nerviosismo de andar en la calle, todo me dejó como un mal sabor a tristeza e incertidumbre. Hoy me levanto y la primera noticia es la de un atentado en Bruselas donde algunos locos , para reclamar una cosa que a fin de cuentas solo les interesa a ellos matan a quienes no saben ni de la existencia de otra vida ajena a la tranquila Bruselas, soy de los que piensa que los  yihadistas   se deberían meter su Corán por donde les quepa y a nadie le va a importar más que a los imbéciles fanáticos de porquería que juran que sus pueblos la pasan mal por culpa de otros, sin parar en cuenta  de las millones de miserias que pasan millones de seres humanos al día, los asesinatos, los que comen una sola vez o cada dos días (si es que comen), esos que tienen una enfermedad terminal y ninguna manera de curarse, los perseguidos por razones religiosas, los que viven en medio de alguna atroz guerra sin tener parte en ninguno de los bandos, en fin, tanta gente jodida de verdad.

Esta mañana me ha dado por pensar que deberíamos celebrar otra cosa en semana santa, creo que (de ser cierto lo de Jesús) nos están pasando una factura enorme por haberle matado a su unigénito hijo a quien en vez de hacerle reverencia, terminó crucificado y muerto por una lanza “humanitaria” en su costado para que la agonía fuese más corta, como en los tiempos celestiales tres minutos equivalen a cien años terrestres, el pobre mesías durmió la siesta, pasó el despecho de quien sabiéndose poderoso fue engañado por su padre, rechazado por quienes deberían de ser sus súbditos para terminar de bandera para millones de desafueros religiosos en nombre de una causa por la cual en su momento a nadie importó, los mismos asesinos del hombre se transformaron en los administradores de la religión y con ello pues se multiplicaron las locuras. Pero entre el siglo XX y lo que va del XXI, la cosa se salió de madres, lo que sospechosamente se acerca a un castigo apocalíptico,  que podría deberse a la ira debida del hijo maltratado o la del padre ofendido, en caso tal no importa, igual estamos fritos.

Es difícil sentirse seguro en ninguna parte, sería interesante preguntarle a dios padre por tanta saña, pero es más fácil (según la cultura popular) preguntarle al diablo quien tampoco es medida de la verdad, sin embargo ante tanta duda bien vale la información, amanecerá y veremos que por lo menos yo me portare muy bien, estaré sobrio, sin amigas ni panas , cero licor ni nada similar debido a este terrorífico brote de insuficiencia salarial aguda que me aqueja de manera terrible obligándome a una conducta tan reprochable que no me queda más que pensar que mi planeta vive una venganza apocalíptica de un padre despechado, luego que la cosa le salió mal con el hijo, cosa nada reprochable pues uno como padre por menos haría más de tener las posibilidades, ya sabemos que no hay nada más sagrado que un hijo.
Nota; si por casualidad los amigos de otras fronteras sienten curiosidad por mis ideas religiosas les recomiendo leer y comprar mi novela En busca de un mundo perfecto
José Ramón Briceño, 2016
@jbdiwancomeback

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