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domingo, agosto 17, 2014

Comentario para los compatriotas en el extranjero


Desde hace algún tiempo hay mucha gente yéndose del país, de hecho me he quedado sin amigotes pues muchos ya están viviendo en otras tierras, esos detalles hacen que uno se cuestione la razón del apego, no tiene muchas vueltas, si estás varado acá es por varias razones, la primera es que el terruño a decir verdad no tiene sustituto, si acá creciste, estudiaste, te enamoraste, tuviste hijos y tienes además tu familia e historia, despegarse para replantearse todo lo que queda de vida en tierra extraña es complicado hasta inventárselo. En segundo lugar la edad y aptitudes, creo firmemente que la gente con oficios inútiles no debe inventar a salir del país así de gratis, toca hacer un plan detallado con contactos previos incluidos, posibles contratadores y hasta un fondo de ahorro para no pasar hambre por mucho tiempo, si eres menor de cuarenta mejor aún pues tienes energías de sobra para hacer cualquier cosa mientras encuentras lo que buscas, de otra es difícil la cosa.

Todo eso sin olvidar el asunto este de la legalidad en materia migratoria, ser inmigrante ilegal es una cosa espantosa pues jamás vas a tener ni los mismos derechos y mucho menos los mismos beneficios de un migrante legal con visa de trabajo y demás, por ultimo (creo yo) eso de irse y dejar acá a los hijos debe ser un asunto espantoso, yo no podría, aunque me niego a calificar a quienes lo hacen por la razón que sea, no puedo aplaudirlos tampoco, uno debe ser responsable hasta en las crisis más horrorosas y hacer de tripas corazón por los hijos, ellos no piden ser traídos al mundo para luego dañarles la infancia con la tristeza de un padre o madre ausente.

Ahora, quien aún evaluando todo lo que he escrito en los párrafos superiores se va, la verdad me da hasta envidia. Cuando hice mi primer intento de migración la verdad no me he vuelto a sentir tan calmado desde aquellos días, eso de levantarse sin que las noticias te alarmen, caminar a cualquier hora de la noche, ir al mercado sin susto y escogiendo que me iba a comprar para la cena, saber que mi (poco realmente, los mesoneros no ganan la gran cosa) sueldo me iba a alcanzar para comprar lo necesario como colofón escogiendo marca, procedencia y hasta precio para comprarlo sin este eterno buscar de por estos lados. Esa calma es difícil de imaginar para quien no la ha sentido.

Como siempre he pensado que uno debe ser consecuente con sus creencias aunque jamás debe dejar de soñar. Igual a diario escribo por acá para no terminar de paciente psiquiátrico, vivo soñando otras cosas, escribiendo a cuanto aviso me tropiezo por las redes, uno nunca sabe cuándo las buenas oportunidades tocan a tu puerta, aunque tampoco van a tocarte si no te haces el suficiente ruido a ver quién te escucha.

Lo único malo que debo hablar de los compatriotas en el extranjero es de su poca solidaridad, los vi en México y la verdad me espantó ver cuanta soberbia, cuanto mojón mental tienen muchos, tanto así que son hasta desagradables, no todos la verdad pero si un buen lote, con lo de la solidaridad es que mientras uno ve a otras colonias de emigrantes que se apoyan entre sí, bien sea dando empleo bajo condiciones decentes o hasta un plato de comida a quien de verdad lo necesita, estos “panas” les sacan el cuerpo bajo cualquier pretexto a todos y si pueden darle la zancadilla lo harán a menos claro que el compatriota le de algún beneficio inmediato, por supuesto, eso no es de gratis, también hay mucho compatriota que se va y se piensa “vivo” para andar portándose mal con quienes le dan la mano, eso es espantoso también. Si se van del país, por lo general lo hacen todos buscando el mismo fin, no entiendo la razón de irse matando las posibilidades solo por dárselas de vivos y cerrándose puertas, a los amigos que pueden ayudar tampoco entiendo la razón de que le nieguen toda ayuda a todos.

Como sé que buena parte de mis lectores está en otros países y algunos hasta son activistas políticos, tengo la impresión que la mejor forma de hacerle daño a este régimen es organizar modos de dar acogida a los emigrantes que puedan aportar cosas, sin intereses escondidos, asociaciones organizadas para dar empleos, gestionar visas, organizar hasta ayuda legal para la inmigración y desde allí dar la batalla con todas las herramientas posibles que van desde libros, blogs, videos , programas de TV, hasta publicaciones periódicas cuyo contenido estoy seguro que hará más creíble a la opinión mundial este desbarajuste que acá vivimos todos.

Seria un buen ejercicio de lucha organizarse para lograr algo de esto que estoy proponiendo, es el momento de dejarse de egoísmos para lograr objetivos claros y beneficios para muchas familias que acá están viviendo al borde de la miseria en condiciones que de verdad son casi de indigencia, aun teniendo profesiones nobles que de seguro en otros destinos podrían serles de más provecho.
Saludos desde mi esquina.
José Ramón Briceño, 2014
@jbdiwancomeback




1 comentario:

Anónimo dijo...

Tristemente mucho de lo que comentas sobre la actitud
de muchos compatriotas en el extranjero es totalmente
cierto. Yo logre emigrar y luego de unos cuantos años
me entro una nostalgia muy grande y un despertar del
sentimiento patriotico a partir de lo que comenzaron
a hacer los muchachos desde febrero de este año. Veo
con una gran indignacion el estado al que ha llegado
nuestro pais. Aun asi prefiero seguir teniendo fe de
que eso va a terminar y hago todo lo que puedo desde
el exterior para tratar de ayudar con nuestra causa.