Aunque
muchos puedan sorprenderse, a veces, muy pocas de verdad, el gobierno no la
pone, acá, en mi ciudad, Maracay, ahora pusieron un servicio de transporte público
que supera con creces las expectativas normales, tienen aire acondicionado, es
barato y sobre todo, no permiten vendedores ambulantes, pedigüeños, ni ningún tipo
de esa fauna exótica y hasta sospechosa que igual te pide dinero como te atraca
o hace de soplones para otros, claro, nada es perfecto, la cosa tarda como hora
y media en recorrer lo que otros buses hacen en cuarenta minutos pues se
detiene en cada parada, así que si andamos apurados ya no es opción, sin
embargo a mediodía, sin plata para taxi y en este plan de peatón, así sea muy
lento vale la pena. Todos los mediodías lo tomo para llevar a mi hija a su
casa.
En
estos días iba de pie, entre la multitud pues en horas pico parecen vagones del
metro en iguales condiciones, dos señoras venían hablando a mi lado, una le
comentaba a la otra sobre una tercera a quien las noticias la tienen enferma,
ella se sorprendía por que la dama en cuestión vivía pegada a tuiter y a las
redes sociales, decía voz en cuello que acá no pasaba nada y si pasaba ella no
le hacía caso, total no podía cambiar nada, en caso tal de que pudiera prefería
vivir en la ignorancia antes que angustiarse por la situación del país, ¿Qué angustia
por el dólar? Si ellos pagaban todo en bolívares, veía (al parecer) el
ejercicio de la crítica como algo absurdo, también acotó que era ´referible
encerrarse en casa, ver cualquier canal del cable y no saber nada, ¿para qué? Ella
con no meterse en política tenía.
Cometí
una indiscreción, aunque no hablé, mi cara dijo todo lo demás, acto seguido
agarre a mi hija y nos fuimos al fondo, antes que se me olvidara la educación y
le dijera sus cuatro vainas a la señora esa. Vale , las ideas toca respetarlas,
pero la ausencia de ellas toca insultarlas, como va a decir alguien que no le
importa nada, seguro la tal viejecita es de las únicas que no tiene achaques,
no tiene que comprar medicinas, no tienen nietos en edad escolar, seguramente
tiene unos hijos con sueldos arrechísimos, anda en bus de puro necia, sobre
todo porque en esas unidades la tercera edad no paga.
Eso
debe ser, no solo tiene familia pudiente, es que los hijos, nietos ,sobrinos y
demás le envían remesas de leche, jabón de tocador, talco, perfumes, champú ,
los típicos parchesitos para los callos y juanetes, aunque no le vi los pies
imagino que como todas sufrirá de alguna vaina, no tiene osteoporosis, los
sobrinos y nietos todos tienen empleos con super sueldos que les alcanza para
el mercado mensual, los nietecitos ( si es que los tiene) que tienen sus padres
con tan buen estatus de vida que no necesitan de nada y nada les falta.
La
verdad, si así es su vida pues la felicito y no dejo de sentir hasta algo de
envidia pues al parecer es la única venezolana conciente que está feliz con la
situación, seguramente por eso es que no sabe que los supermercados están vacíos,
las librerías y papelerías sobreviven de milagro puro, los centros comerciales
están a media máquina, las medicinas no existen, el desempleo cunde y cada día
hay más, la inseguridad yo no es una posibilidad, es una certeza , los enfermos
se mueren no de enfermedad si no de no encontrar manera de curarse, hasta los
animalitos de la casa sufren la escasez de comida para gatos.
Ese
ánimo de ser ignorantes por voluntad propia, de no buscar respuestas ni
reclamar nada en pro del avance real de la comunidad es lo que nos tiene en el
subsuelo, todavía la gente no asimila que el país está hecho una mierda
(perdón, perdí las formas), esa gente que dice “hasta donde llegaremos” no se quieren
enterar que ya estamos allí, que no hay vuelta atrás y si no ponemos de nuestra
parte todo el odio y el resentimiento explotará y nos llevará hasta donde nadie
quiere ir, sin embargo el año pasado quedaron en nuestra morgues más de 25 mil
compatriotas que pueden dar fe de hacia dónde vamos a llegar siendo los simples
borregos por elección, ciertamente hay mucha molestia pero toca salir de tuiter
y decir las cosas gritado, que les de vergüenza, boicoteemos las colas, los
ministerios, las oficinas públicas, los autobuses, hagan volantes, tiren piedras,
pero por favor, hagan que con solo quejarnos no llegamos a ningún lado pues
ahora ni los aeropuertos, sin plata, sin aviones, sin pasaportes y sin patria,
perdón de esa si hay solo que es invisible, si no me creen consulten con su
despensa a ver.
José
Ramón Briceño, 2014
@jbdiwancomeback