Uno
de los grandes placeres de un artista es que su obra sea vista y comentada,
claro, otro de los placeres es ganar dinero con el oficio, sin embargo en estas
tierras donde la ignorancia es lo normal y la inteligencia la excepción, toca
conformarse con los halagos, sobre todo con aquellos sinceros, esos los
agradezco inmensamente. Últimamente andando por ahí siempre sale alguno que
confiesa leerme, muchas veces junto con la felicitación viene la disculpa pues
alegan no hacer comentarios públicos para no arriesgar su empleo, eso se
entiende más no se comparte, no entiendo como el hacer críticas sobre la
situación actual, sobre todo si sabemos que mis textos son una suerte de
“mensaje a Garcia” para que alguno tenga, en la administración pública claro,
un rapto de brillo mental y levante también su voz para intentar detener esta
debacle que está arrastrando a todos al estercolero de la historia.
Como
quisiera ser invitado a uno de esos “diálogos” con el gobierno, poder
argumentar con estadísticas, relatos, entrevistas y cualquier otro medio a mi
alcance la plasta que están poniendo en todos los niveles de la vida nacional.
Lo peor es que se supone que casi todos (menos el presidente claro) fueron a la
universidad, así sea la de los militares que no enseña mucho que digamos, que
han viajado por el mundo, han visto de cerca sitios donde la cosa funciona y
saben de sobra que el marxismo es una ideología que descansa en el panteón de
las estupideces del pensamiento humano, la memoria de Lenín no la respetan ni
sus seguidores , Cuba es un reducto de milicos, policías, políticos arrastrados
todos gobernados por unos vejetes que se creen en los tiempos de la guerra fría
y que encontraron a otros imbéciles que con el orto bien relajado a la expectativa de un placer venéreo, les
regalan hasta lo que no es de ellos para sentirse bien, igual opinión tengo de
quienes los apoyan desde ministerios y demás dependencias del estado.
Sería
interesante que a la gente como uno le dieran un espacio allí, para contarles
de cerca como no encontramos nada de los que salimos a buscar a diario, de como
un kilo de café se ha vuelto un producto de lujo, una afeitadora decente lo más
deseado por hombres y mujeres, que un litro de desinfectante o de cera han
desaparecido, comprar la leche en cualquier presentación es asunto de profunda investigación y suerte,
amén de que en algunos casos toca pagar hasta tres veces su valor para dar a
los niños y ancianos de cada casa, como las medicinas elementales para la
supervivencia están en extinción, la verdad tengo atragantado mucho por decir ,
palabrotas incluidas, a tanto imbécil que con su sonrisa de comercial anda
pontificando sobre las “bondades” de su revolución estúpida que a contrapelo de
la inteligencia está matando todo lo que nos pudiere hacer avanzar como país.
Últimamente
estoy por creer que los chavistas adolecen de algún cromosoma que les impide la
lógica, sobre todo cuando uno los ve de paseo por las capitales del mundo sin
pasar por CADIVI ni pagar dólar negro, cuando se sabe que para comprar los
3.000 miserables dólares del cupo no solo toca pender velas a todos los santos,
animas, fantasmas, demonios o ángeles según sea la creencia del solicitante,
además son 150.000 bolívares , para los que no tienen idea, imagínense nomas que eso equivale a 50 sueldos básicos ,
es como si un obrero en Panamá necesitase de cincuenta mil dólares para poder
venir a Venezuela por unos días, es como para llorar, eso sin hablar del
suplicio de encontrar pasaje en algunas de las pocas aerolíneas que todavía tienen
el valor de recalar en estos aeropuertos.
Como
me agradaría saltarme las formas e insultar al viejito Elías Eljuri, por
descarado, grosero, mentiroso, caretabla y vendido. No puedo creer que quien
dirige la oficina nacional de estadística tenga la desfachatez de decir que
ahora vivimos mejor que en la cuarta, seguramente para él no es falso, quizás
en la cuarta era un funcionario oscuro condenado al ostracismo por imbécil,
seguramente jamás ganó los suficiente para sentirse holgado en eso de la economía,
ahora pues ha de tener bonos por cada mentira, una bonificación por estadística
trucada, despachos de todo lo imaginable, eso que ha desaparecido que ahora es
llevado hasta su casa por camiones para darle a toda la familia, quizás sus
hijos , nietos y hasta bisnietos gozan de privilegios que antes, en la cuarta,
solo los soñaba y ahora son una realidad
irrebatible, ese señor ahora como homenaje a todas esas maravillas que les a la
revolución no puede más que rendirse ante el poder omnímodo y mentir .
Discúlpeme
de verdad señor Eljuri, pues a mí me enseñaron en mi casa que a la gente mayor
se le respeta, intento hacer lo mismo con mi hija, además estoy claro qie uno
debe enseñar con el ejemplo, sin embargo, ante tamaño despropósito no queda de
otra si no la de recordarle a su madre, y dudar de su moral, la de su madre
pues la suya ya la conocemos por sus declaraciones, lástima tener que insultar
a un anciano que debería ser sabio, sin embargo se empeña en lo contrario aun
en desmedro de su imagen, milagros de esta ROBOILUSION.
José
Ramón Briceño, 2014
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