Estamos
en una época extraña, estos tiempos parecieran premiar la estupidez sobre la
razón, ya casi nadie quiere leer ni razonar, las cosas más vacías son las que
más dinero producen, ya los “músicos” famosos hacen gala de su ignorancia y
solo pocos lo critican, los políticos son en muchos casos exhiben las letrinas
que tienen por cerebro, lo peor es que existe quienes los aplauden y hasta los
defienden sin que les de pudor la cosa, las películas de moda son por mucho
monumentos a la simpleza del pensamiento, es más, ahora si una mujer está bien
buena, ha invertido bastante en su cuerpo ya es suficiente aval para
convertirse en millonaria y hasta reality show con club de fans pudiera tener.
La
intelectualidad ha desaparecido en mi país, todos quieren que pase algo pero
ninguno colabora ciertamente para que suceda. Por ejemplo, a mí me agradó el
asunto este del congreso ciudadano, me parece una oportunidad de oro para darle
forma a la cosa ideológica dentro de la oposición que tanta falta hace, pero he leído
con cierto estupor como algunos hay por ahí que bombardean la cosa como si del
anticristo se hablase, ellos alzan su voz pero no para colaborar como sería si
fuesen gente seria que tiene propuestas concretas, creo yo que el bombardear
esas iniciativas nos lleva más atrás y hasta se colabora con este régimen coprológico
donde las moscas no nos deja vivir a ninguno.
No
entiendo el plan de muchos, pareciera una confabulación para seguir pescando en
rio revuelto donde solo unos pocos pescan mientras los demás miramos desde la
orilla el festín ajeno con el bolsillo vacío, no sé, quizás alguno de mis
lectores pueda iluminarme en eso de entender la política de la MUD y otros
asociados. Si la oposición sigue sin marco ideológico seguiremos dándonos topes
contra la pared, estaremos jodidos por un largo rato, pues mientras los
opositores se pelean por cargos que no tienen, por “liderazgos” de cuatro
gatos, el gobierno hace uso de su chequera junto a la patente de corso a
malandros, milicos y/o policías (que parecieran ser lo mismo muchas veces) para
seguir haciendo su fiesta de odio, balas, plata, abuso y poder para seguir
nadando en esta miseria.
Creo
sinceramente que el peor cáncer opositor es que todos quieren ser protagonistas
sin dejar espacio a nadie más, los capitostes de los partidos y demás
organizaciones quieren ser los primeros pimentones de todo el guiso sin dejar
que oros hagan su parte, si no los invitan pues hacen de kamikazes bombardeando
toda iniciativa, tengo la impresión que en muchos casos van ayuntados por el
gobierno para hacer su labor entorpecedora, no le ve otro sentido a eso.
No
veo complicado el organizar espacios para el pensamiento, ese debe dejarse
libre y ser apoyado desde todos los ángulos posibles para que pueda despegar,
no estamos en momentos donde el egoísmo deba prevalecer, estamos en un instante
histórico donde la única arma que nos queda a los CIUDADANOS es hacernos valer
por lo que tenemos en el cerebro, organizarnos en serio para expulsar a los
idiotas de vuelta a sus guetos, quizás alguien levantará su voz para decirme
extremista pero seamos sinceros, los extremistas son otros, si no fuese así la
cosa en este país pintaría otro color menos amargo que este color de hormiga de
vivir en zona de guerra, somos el segundo país más violento de Latinoamérica,
apenas un poco más abajo que México cuya capital tiene más habitantes que todo
nuestro país, cualquier colonia (barriada o urbanización) tiene la misma
cantidad de gente que nuestra capital, aun así, porcentualmente se muere menos
gente en todo ese país de 180.000.000 de personas que en este de apenas
35.000.000 .
Ahora
quienes se oponen al congreso aluden una tal junta cívico-militar para el
cambio de gobierno, la verdad eso me espanta, el estado debe ser civilista, los
militares cuan perros rabiosos deben volver a sus cuarteles, ellos son
coparticipes de todo este desbarajuste, hacen pingues negocios en todos lados,
si por mi fuese no habría ni policía tan siquiera pues esos (quizás no todos
pero si muchos) están ahora de parte del hampa, si no me creen revisen la
prensa y vean en cuantos asuntos raros han estado implicados los funcionarios,
desde secuestros, atracos, tráfico de drogas y quien sabe que más, igual los
militares.
Para
cerrar, dejémonos de pajas mentales, dejemos a los políticos de oficio
desgañitarse solos, apoyemos las iniciativas que vayan en función del avance
nacional, denunciemos, organicémonos que la cosa va para largo y el hombre
nuevo al parecer es un mendigo revolucionario que al final parece ser el deseo
de toda la dirigencia gubernamental, tristemente también de parte de algunos
opositores, ojalá tuviese yo una palestra en el fulano congreso, quisiera ser
parte de la historia de mi país, dejar de cambiar el mundo desde mi sala o
desde algún botiquín para aportar y estar seguro de que pongo mi grano de
arena.
José
Ramón Briceño , 2014
@jbdiwancomeback