Mañana
saldré a votar, lo haré por el candidato de mi preferencia, ese que ya todos
saben cuál será, no tiene sentido hacer apología política de mis preferencias
ya que todos saben o se imaginan cual es, sin embargo antes de cumplir con mi
deber patriótico toca hacer algunas diligencias solo por puro necio que soy,
quiero compartir mi agenda con ustedes para que adivinen las razones que me
mueven a salir de mi casa, este domingo. Día de mi cumpleaños número que carajo
importa, para ejercer mi derecho-deber.
El
sábado antes que sean las ocho de la mañana saldré a buscar un cajero automático
que me permita sacar más de seis mil bolívares que serán destinados a
transformarse en Euros, los cuales tendrán como destino final mi colchón, no se
rían, es cierto, los pondré bajo el colchón de mi cama donde estarán seguros,
no quiero que el lunes el presidente amanezca con una puntada de colón y le dé
por bloquear la posibilidad de tener acceso a la moneda extranjera, esa tan fea
que no se deprecia porque nadie la quiere,
pero yo de puro necio que soy, la compraré, lo más seguro es que lo haga
solamente para no volverme loco en la vorágine de consumo típica de este mes,
las navidades se prestan para muchos excesos.
Luego
de comprar la divisa cochina esa, tengo que confesarles que lo hago solamente
para que mi novia eje la necedad, ella quiere viajar y pretende que le
colabores con algunos dólares, pero como simplemente no me da la gana de tener
la moneda imperial voy por el euro, que cuando menos es multinacional y no me
queda el mal sabor de colaborar con un imperio tan cochino como el de Mickey
mouse. Este viernes antes de la fulana ley seca he comprado mi bastimento de wiski,
mi preferido Coñac Napoleón, el excelente tequila Don Pedro y algunas botellas
de vodka que sumadas a unos cuantos caldos europeos me harán el domingo
menos espantoso de lo normal, mi novia en su eterno fastidio me pide que le
compre unos medallones de lomito, he comprado por lo menos seis kilos, así le
saco el antojo y de paso tengo para desayunar con arepas entre semana, es que
me aburro de comer siempre el mismo jamón y ahora que radicalicé la dieta vale
comprar cortes magros pero regulados, que espanto el de los alarmistas que hablan
de colas. Es más he leído de ciertos personajes espantosos que hablan de colas
interminables para comprar leche, la verdad es que son unos vende patrias pues
en casa tengo desde la deslactosada , la descremada, semi descremada y la
completa, la última para mi hija y las
demás por mi dieta eterna, esto de pelear con el sobre peso es cosa seria.
También
me toca pensar, y quizás lo haga, en comprarme un congelador horizontal para
tener mis reservas de carne, pollo y pescado, esa es para diversificar mi
dieta, además tanta harina de maíz me ha matado el colón y toca desintoxicarlo
a punta de cortes magros y carnes blancas, se me olvidaba el de guardar los
cuatro perniles de cerdo que tengo que comprar. El único fastidio es tanto taxi
que toca tomar. No les he contado pero en mi necedad me niego a tener carro,
pues me da fastidio manejar, la verdad es casi que pánico, no me agrada la responsabilidad
de poder atropellar alguna viejita, menos mal que los motorizados en esta
nación son tan respetuosos que las pocas veces que me ha tocado manejar me
ayudan con mi temor, ellos me ven a los ojos y siempre me acompañan, menos mal
que existen ya que son menos empalagosos con la policía que jamás quiere
recibir ni propina de tan valerosos que son.
Debo
recordar ir al banco con un bolso, es que tanto efectivo en los bolsillos
molesta, n tiene sentido tener más de tres mil euros que ni siquiera salen en
billetes de a quinientos, los bancos en su eterna necedad de joder a los
clientes seguro me los dan en billetes de cincuenta, espero que no lo hagan
para que no me incomoden pues toca dar muchas vueltas hoy, que fastidio eso,
además tener que hacer las compras, organizar la nevera y el congelador con esa
carne y las demás cosas me tendrán ocupado un buen rato, menos mal que tengo mi
ración de licores exóticos para relajarme, de otra me daría algo, aunque debo
admitir que la comida no me molesta pues por lo general como en restaurantes,
solo que a veces eso de ponerse corbata para ir a un comedero donde me cobran baratísimo
y en dólares que casi no valen nada, ya me tiene harto, tengo que considerar
contratar a un chef personal y así se me quita ese fastidio.
Mientras
tomo la decisión tengo la calma de haber llenado mi despensa y mi colchón, en
ese último punto es bueno pues es una forma de ahorro ya que cuando salgo de
viaje nunca lo toco ya que con lo de las tarjetas de débito basta y sobra, pero
a mi novia pues toca agradarla un poco más. Ella no quiere creer que mi sueldo
de profesor universitario da para eso y más, yo prefiero dejarla en la
ignorancia no vaya a ser que decida cambiar de
carro y quiera que le regale un minicord, que es un vehículo espantoso
por lo pequeño, ya le di una 4X4 a su medida, pero mujer al fin ella quiere ese
otro porque le parece muy cuchi.
Ahora,
en serio, todo lo anterior no es más que un delirio producido por el vodka
tonic de este viernes por la noche, invitados por mi viejo que me visitó y
baratos pues no hay de otra, todo es un delirio compartido por la mayoría de
los compatriotas que queremos un país pujante y no este eterno chapalear
cloacal de tinte rojorojito, lo único cierto en este texto es que voy a votar,
que siempre pensaré que todo futuro puede ser mejor, que el dia lunes celebraré
o me molestaré, pero si es lo segundo tomaré las calles en conjunto con todos
los inconformes para comenzar a construir un país donde el futuro sea una
certeza y no la entelequia de hoy día, seamos necios votemos y reclamemos sin
esperar que los lideres nos lo ordenen, seamos ciudadanos, no pendejos y
rompamos este asqueroso circulo vicioso, que en vez de ser divino como los
vicios es amargo como un mal vino, incomodo como una mala noche y triste como
un eterno despecho.
José
ramón Briceño 2013
@jbdiwancomeback