Es
indudable que el país entero está en situación crítica, ya no es solo que no
hay harinas, es que no se encuentra casi nada en los supermercados, las caras crispadas
de los clientes lo dicen todo. En algunos estados la guerra ya está instalada
en las calles, en mi ciudad no se ve movimiento de nada, no sabemos que sucede,
quizás todos los estudiantes se fueron a ayudar en otros espacios donde hay más
movimiento, la verdad no sé, sin embargo cada día hay una marcha protestando
por alguna cosa, que misteriosamente es dejada en paz por los antimotines,
quien sabe que pasa.
Lo
que si se es que la oposición, esa que está en la asamblea nacional, los de los
municipios, alcaldes, concejales, gobernadores, se han vuelto invisibles,
ninguno ha levantado su voz más que dos excepciones con las cuales me quito el
sombrero o la gorra, según sea lo que tenga puesto. El resto imagino que está
bajo la cama, temblando de miedo o quien sabe haciendo que, el cuento es que no
están visibles, no hacen acto de presencia en las marchas, no dan apoyo logístico,
si estoy equivocado que alguien me saque de mi error por favor.
En
las últimas elecciones hablaron, chillaron, pidieron votos, dieron besitos a
viejitas y niños, regalaron planchas de zinc, tanques de agua, prometieron
hasta el paraíso eterno para los seguidores. Ganadores y perdedores, ahora,
cuando el coraje hace falta han puesto pies en polvorosa, otros como el tal
Gaviria ha dado la espalda al electorado y se retrata en un fulano dialogo de
paz que más parece monologo y letanía de guerra, él sabe que no representa a
nadie y la plata en la política manda, de los otros mejor no hablar pues mi pensar
es tan ofensivo que me da pena escribirlo, nobleza obliga a no escupir insultos
tan gruesos en letra times new roman 12 a espacio y medio.
Menos
mal que existen aún venezolanos valientes poniéndole el pecho a la cosa,
mientras, en la dimensión desconocida, esa de mordazas y mentiras hay un escuadrón
de sayones pagados por el estado para participar en ese sainete de negaciones,
todos dicen que lo evidente no existe, no hay desabastecimiento, basta ir a
cualquier establecimiento y pedir un simple litro de leche para ver que el
dependiente o algún pasillero te diga con una sonrisa forzada, no hay, es más,
en algunos sitios hacen que la gente haga colas fuera del supermercado solo por
una “medida de seguridad” , hacen pasar a los clientes de 15 en 15, mientras
nunca falta algún despistado que pregunte la razón de la cola, el encargado de
seguridad ya no sonríe, dice que no hay nada de lo escaso pero que por las
medidas antes mencionadas está la cola, pero tenemos patria.
Sin
preguntar nada solo resta hacer un recorrido por los establecimientos
comerciales, ya todo está escuálidamente surtido, solo sobran las cosas que o
son lujos o son de esas que se compran muy poco, así nos podemos encontrar con
una pieza entera de queso Pecorino en todas sus presentaciones pero no hay ni
queso amarillo y mucho menos queso llanero, que en caso de encontrarse no baja
de 200 bolívares el kilo, del queso importado mejor ni les cuento el precio,
sin embargo hay unos cuantos actorsuchos sin empleo diciendo voz en cuello que
todo lo que reclamamos es mentira, que estamos al servicio de la CIA, el
Mossad, MI5 o quien sabe cuál agencia de recontra inteligencia.
Ojalá
mañana me levante y en lo que encienda la computadora, mientras mi inefable
café matutino levanta hervor, lea con absoluta sorpresa que se unieron a las
protestas varios diputados, alcaldes, concejales y gobernadores opositores, que
entre todos compraron las primeras páginas de los diarios de circulación
nacional, publicaron un comunicado expresando su rabia por los muertos,
detenidos junto a los desaparecidos del régimen, que la policía se retire por
el asco que sienten al servir a un amo infectado del virus cubano, la guardia
despierte de su letargo y descubra, no sin sorpresas que han sido contagiados
de un virus vudú que los ha vuelto unos animales, pidan perdón y por la rabia
de ser unos viles peones del abusador extranjero, expulsen a patadas a todos
los esbirros que tanto mal han hecho a mi país, acto seguido los mandamases
tomen vuelos a los destinos que prefieran para disfrutar su robo masificado,
tranquilos, luego los extraditamos, renueven el CNE, volvemos a las elecciones
manuales y verdaderas, sin asomo del fraude continuado de siempre, los
colectivos serán eliminados y olvidados, las guarimbas recogidas y el futuro
recibido, pero a pesar de todo las cuentas deben ser cobradas, a pesar de mi
delirio depresivo de esta noche no las olvido y mi esquina se encargará de
reordarlas.
Buenas
noches.
José
Ramón Briceño Diwan, 2014
@jbdiwancomeback