Tengo
dos días intentando escribir un texto decente para publicarlo en mi blog, la
verdad son tantas las cosas que la desesperanza me ha obligado a pensar que no
he encontrado ni el tono ni el verbo para expresarlo de manera que se entienda,
así que me dejaré llevar por mi pensamiento gris del día e intentar compartir
mi preocupación. Realmente repetir nuestra situación ya suena redundante, decir
cosas que nadie haya dicho es una complicación pues al leer lo que gritan las
redes, sabemos que pasa y si hacemos un mínimo esfuerzo de imaginación sabremos
hacia dónde vamos.
Creo
que TODOS debemos salir de la “zona de confort” dejarnos de pendejadas y saber
que en cualquier momento nos termina de caer el cepo y nos quedaremos
encerrados en este país, sin posibilidades ciertas de hacer nada más que rezar
a la divinidad que les provoque rezar, no solo para amanecer al día siguiente, también
para comer, vestirse, salir y hasta tener pareja o mantener a los hijos, no hay
forma fácil de predecir el futuro ni manera amable de decirlo.
Tengo
la esperanza de que en alguna parte una camada de hombres y mujeres valientes
estén conspirando, que de alguna manera algún país esté colaborando con fondos,
armas y especialistas para que esa labor se lleve a cabo, quizás también sueño
con que en caso de darse esa asonada pueda colaborar con algo y algunos de
ellos me lean para que por lo menos sepa que aunque sea con mis letras he
colaborado con su labor. Como sé que en alguna parte algún esbirro de los
muchos “patriotas cooperantes” con sin
sueldo me lea, sepa que también espero que por lo menos sea un creyente y su
culpa pueda ser atribuida a la sobredosis de ignorancia típica de gentuzas
obtusas como ese tipo de gente.
Quizás
alguien más sensato que yo, se persignará y me insultará por desear la muerte
de tanta gente, sin embargo quiero decirle que no me interesa saber que estoy
haciendo mal, les voy a enumerar mis razones. Antes de hablar de cosas que le
interesan al colectivo les voy a contar por qué he decidido pensar como pienso,
la verdad estoy harto de que mi sueldo sea una entelequia, sabemos que en
ninguna parte del mundo los maestros son millonarios, es más, si ponemos
atención a lo que el cine y la televisión nos muestran, podemos ver que en
cualquier parte del mundo los maestros somos mal pagados, lo que de verdad me
indigna es que ni siquiera alcance el sueldo para comprar un mercado medio
decente, mucho menos ropa y zapatos, pensar en vacaciones es una vaina sacrílega
a menos claro que le atornilles la familia a algún familiar que viva en alguna
zona turística y ni así te libras del incordio de contar las monedas para
completar una comida.
En
otro orden de ideas, si hablamos de que espantoso es hablar de la violencia, bástese
con darse una vuelta por las estadísticas de muertos y compararlas digamos con
la guerra de la franja de Gaza, donde aviones de guerra bombardean , soldados
profesionales contra milicianos se destripan a bala todos los días del mundo, pero
a fin de mes tienen apenas la cuarta parte de los muertos que hay en este país
donde supuestamente tenemos más de cien años sin guerras declaradas, dense una
vueltica por los barrios de sus ciudades y descubrirán más de una calle
custodiada por fulanos que portan armas y se les nota a leguas que jamás han
pasado ni siquiera por un periodo de instrucción militar, es más su catadura
grita a leguas una boleta de captura sin que los organismos de (in)seguridad
del estado digan ni mú, busquen entre sus amistades cuantos han sido
extorsionados por los hampones , con el agravante de que las mismas autoridades
les aconsejan ubicar algún contacto que conozca gente de las altas esferas del
intra-gobierno de los penales, esos que llaman PRANES.
Hace
tiempo tengo una teoría muy fea, creo que en los países donde hay paz y el
hampa no es tan ruda como por acá, es donde la guerra les recuerda cada tanto
tiempo cuanta maldad encierra la gente en sus corazones, vean la historia de
nuestro país, antes de 1970 los crímenes eran si bien algo que sucedía con más
o menos regularidad no eran tan espantosos ni al por mayor como ahora, los que
adoran Europa lean por favor los relatos de las dos guerras mundiales y verán como
los ahora ultra pacíficos y respetuosos de la ley , destriparon gente al por
mayor hasta hartarse de sangre y asco por su pasado histórico, quizás quienes vean
en USA el mayor ejemplo, tengan que recordar que sus ciudadanos han estado en
cientos de guerras desde finales del siglo XIX cuando se acabaron las internas
vieron en el extranjero sitios fértiles para liberar los demonios nacionales.
Venezuela
no es la excepción estamos a las puertas de un conflicto que ha sido asordinado
por el aparato estatal, que además nos tiene encerrados desde temprano, sin
contar claro con que las economías de casi todos están en el mínimo, cosa que
no permite de ninguna manera ser la mitad de lo fiesteros que fuimos alguna
vez, aunque tengo fe en que algunos valientes andan por ahí burlando la “seguridad
del estado” también quiero creer en que necesariamente tengo que estar
equivocado, nadie me va a tocar el hombro jamás para pedirme que tome algún
partido en una guerra que no quiero, pero de la cual (al parecer) toda esta
historia me quiere mostrar que no la podremos evitar.
José Ramón Briceño, 2015
@jbdiwancomeback
Foto José Briceño @plurifotos |