Buen día, tengo algún tiempo pensando en el asunto político, como ya se han dado cuenta, pareciera que no hay nada más en que pensar, la verdad es al contrario, sin embargo veo no sin cierta incomodidad, que todos o cuando menos la mayoría de la gente ve ese asunto político como algo superficial, desde los fanáticos “comunistas” que al final no son más que pequeños burgueses buscando mejorar su vida (lo normal pues) y en el camino terminan siendo menos que gente, olvidan hasta sus principios solo por ser lacayos del poder, cuya obediencia perruna ofende más que la de los milicos, cuando menos ellos tienen la excusa de que desde el primer día de escuela, cuando el poder es una entelequia posible, ya los adiestran como a los perros para que no tengan escapatoria ni moral, para cuando llegue alguna orden, esta se ejecute sin pensar siquiera, solo les queda explorar su lado sádico, tal y como las millones de historias en el mundo lo demuestran, a diferencia de los otros fanáticos de boina, franelita o disfraz de ministro, quienes teniendo la opción de decir que no, pues prefieren callar antes que negarse los gustos del poder.
Desde la oposición no es menos terrible la cosa, ahí vemos a muchos que en algún momento poco les faltó para escupir el ojo del galáctico y ahora pues se babean por darle su abrazo y su beso al heredero, saltan la talanquera sin que se les mueva un pelo, así, como quien decide que una camisa ya ha pasado de moda y la cuelga en la puerta para que cualquiera que la necesite se la lleve, mientras ellos renuevan su guardarropa. No entiendo eso, se supone que las ideas mutan pero nunca desaparecen y menos aún de un plumazo.
Como buen docente de literatura mi biblia son los libros, la academia le enseña a uno que el instinto debe contrastarse con la teoría y esta a su vez (en la medida de lo posible) con la realidad, yo lo hice y me he llevado un chasco de niveles mayúsculos. La razón de todo es muy simple, acá no existen líderes, ni el galáctico ni el heredero y mucho menos el eterno candidato, al final no son más que reflejos de la cayapa mediática a la que han sido sometidos, eso lo saben los asesores del heredero y he allí la razón de esta censura “moderada” que se parece tanto a un bozal, pero de dólares no de arepas ya que medio que no se doblegue medio que compran por medio de algún testaferro, así se aseguran la línea editorial, una que pueda ser modelada para impulsar al que quieran, así se previenen de algún real líder que se aparezca, sin sorpresas como le encanta a los milicos y a los póliticuchos comunistoides imbéciles.
¿Qué es un líder?, los hay de todos los tamaños y colores, desde los ocasionales, que surgen de un hecho fortuito y les toca sacar la cara, los de guerra, los parciales y los LIDERES de verdad, esos que no están sujetos a nadie, que inspiran, cuya causa es justa y el atropello no es una opción, son aquellos que inspiran a muchas generaciones aun después de muertos, que en su momento la moral la tuvieron tan en cuenta que no existe manera de hablar mal de ellos sin sentirse incomodo, los verdaderos líderes no necesitan del poder constituido pues el poder son ellos y no tiene nada que ver con milicos ni armas más allá de las ideas, para el verdadero líder la censura jamás es una opción pues respetan tanto las ideas que más bien animan a su existencia sin que por ello halla menoscabo a su dignidad ni jerarquía, nunca jamás se sirven de la violencia en ninguna de sus formas para ser entendidos ni oídos, asumen sus culpas y errores, son los primeros en la línea de acción, no se escudan ante enemigos reales o imaginarios, detestan el fanatismo pues por lo general este termina torciendo el rumbo deseado, por encima de todas las cosas reclaman justicia real más allá del problema momentáneo y tienen visión de la realidad sin esa fatal costumbre de sufrir la ceguera del poder, no reclaman ser los eternos jefes, tienen conciencia de su tiempo, la cobardía no es una opción y el dinero solo compra lo necesario para vivir, no para comprar conciencias ni prebendas.
Una vez expuesto mi punto sobre el liderazgo, sería interesante conocer la opinión de los lectores al respecto, ¿tenemos lideres reales? O todos son imaginarios tal y como lo pienso, ¿las ideologías existen para todos o son el disfraz para tener la ansiada dupla de poder y dinero?.
Si les provoca insúltenme por sacrílego, pero que bueno sería que de este articulo surgiese una diatriba que obligase a todos a replantearse el cuento político, la tal revolución no existe más que en la fantasía de los fanáticos, la oposición en la mente de tipos como yo pues los poquísimos que acceden al poder doblan la testuz ante los vericuetos del poder, con dignas y aplaudidas excepciones, el rastrerismo es lo único democrático que nos queda, el valor lo tienen muy pocos. Dejémonos de pensar en pajaritos preñados, la solución a este drama está muy lejos por la omisión y el olvido de muchos, ojalá ese líder ideal salga a flote en esta hora de angustia y desolación, que el odio no nos consuma, las ideas renazcan y con ellas pues mi nación entre de nuevo en la senda de dejar el espantoso tercer mundo que de tan feo más bien parece que inventamos un cuarto mundo, que cuan virus nos está comiendo las entrañas hasta transformarnos en zombis, que añoran su mar de la felicidad, sin darse cuenta que ya nadamos en un océano de tristezas.
José Ramón Briceño Diwan, 2013
@jbdiwancomeback
