El
post de hoy he tenido que suspenderlo, la verdad lo traía escrito, acomodado,
editado y hasta consultado pues forma parte del esbozo para un relato que estoy
escribiendo, sin embargo Movistar no colabora en eso de poder usar mi celular
para enviar emails por tanto aprovecharé el rato que tengo en este ciber para
escribir algunas de las cosas que más me molestan en estos días.
Puedo
entender que los ministros digan por todas las vías su guion de fantasía sobre conclaves
asesinos, conspiraciones de todos los tipos y hasta la mala cosa esa de la
campaña de descredito que hay en su contra, digamos que lo caradura es parte
del cargo asumido. Lo que no puedo dejar de señalar es que a pesar de todo lo
que están viendo sus reacciones no pasan de lo mediatico, de señalarse, de
gritar, poner presos, dar noticias grandilocuentes sobre pendejadas que tampoco
hacen mucho pero en ningún caso hay acciones concretas que logren avances en la
calidad de vida de nadie que no sean ellos mismos.
No
me voy a poner dramático, ni contarles que comer sale caro, ni pedir ayuda,
simplemente me limitaré a decir que el gobierno lo único que hace bien es la
propaganda y eso porque le pagan cifras millonarias a asesores inescrupulosos
que ordenan todo el asunto promocional, de resto estamos peor cada día. Hace unos
días murió un niño de cáncer, el joven había salido a protestar que no tenía
insumos y tanta verdad hubo en sus palabras que hoy ya no necesita medicinas
pues ha muerto, por fortuna no sé lo que se siente perder un hijo, verlo apagándose
con la impotencia de no poder hacer nada, no tener los medios para pagar la medicación
ni apoyo de nadie para lograr mi cometido.
Como
padre no puedo hacer más que solidarizarme con la familia de ese niño, como
padre también doy gracias al universo por permitirme disfrutar a mi hija cada día,
rogando que jamás se enfermen ninguno de mis seres queridos y no poder hacer más
que rezar.
El
asunto no es que odie o no a los fulanos del gobierno, que el presidente me
parezca idiota y todos los chavistas/maduristas imbéciles, al final gentuza hay
hasta en las mejores familias, lo que más me molesta es que ellos estén empeñados
en no hacer nada para paliar una situación insostenible, sobre todo en eso de
la salud. He escuchado muchas historias de horror , muertes inexplicables que
hace cuatro años se resolvían comprando en la farmacia de la esquina pero que
ahora ya no se encuentran ni en las droguerías, eso en caso de tener el dinero
para hacerlo, en otros casos hay quienes ni tienen para comer, mucho menos para
comprar medicinas costosas, tampoco baratas pues las farmacias están desguarnecidas.
No
sé, imagino que todos los enchufados, ministros, ministras, periodistas,
diputados, militares (y pare usted de contar los cargos de quienes viven del
estado, que tienen poder de decisión pero que no hacen nada) son solteros, sin
hijos además de huérfanos sin familia ni madre para que no les conmueva la
crisis que vivimos en Venezuela. Lo más grave es que quienes tienen acceso a
mercados lujosos traídos en avión especialmente para ellos, clínicas en el
extranjero donde llevar a sus familiares, hijos estudiando en euros o dólares, es
decir, los que tienen todo para ellos, son pocos , si acaso unas cuantas
docenas mientras que quienes los sostienen y se sienten maravillosos por ganar
la descomunal fortuna de mil dólares al mes, son cientos y cuidado de no miles,
más aun los miserables que les hacen de colchón político a todos los otros que están
encima en la cadena evolutiva de su miseria socialista.
Desear
mal para alguien al final es un bumerang , yo apuesto a que el karma no se
olvide de ninguno y que si tengo chance pueda yo lanzar la primera piedra para
enterrarlos hasta el mismo centro del olvido miserable que merecen por su mala
entraña. Hoy espero me disculpen la rabia, esa es la única cosa que me sobra en
estos tiempos.
Josè
Ramòn Briceño . 2016
@jbdiwancomeback