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lunes, diciembre 02, 2024

Mea Culpa , o de como mis pecados terrenales me llevaran al cielo divertido

 

Tengo la impresión de que somos criminales aun sin querer serlo, es que la sociedad, la cultura y hasta la religión de mis ancestros (católicos) fuerza a la creencia de que soy culpable de algo, no importa de qué, pero al final siempre hay alguna culpa que esgrimir, por ejemplo, si tomamos los 10 mandamientos y que para no ponerme intenso ni rebuscado los he bajado de Wikipedia y para quienes no los conocen acá se los presento:

Amarás a Dios sobre todas las cosas, No tomarás el nombre de Dios en vano, Santificarás las fiestas, Honrarás a tu padre y a tu madre, No matarás, No cometerás actos impuros, No robarás, No darás falso testimonio ni mentirás, No consentirás pensamientos ni deseos impuros, No codiciarás los bienes ajenos.

De esos 10 asuntos básicos que parecen un acuerdo de convivencia bastante justo solo puedo asegurar sin lugar a dudas que cumplo con cuatro o menos, porque el de No Matarás tampoco es muy claro de si es a otro humano o los animales de comer aplican, pero digamos que solo se refiere a otros humanos, entonces ahí estoy libre de culpa. De todas maneras, pasaré lista, Dios es un personaje bastante esquivo y hay muchas ocasiones en las que su poderosa omnipresencia queda en entredicho, por tanto, mientras uno está con el agua al cuello esperando que la mejor cosa que te pueda pasar es la muerte tampoco es que vayas a decir que lo amas, pero aunque sea cuestión de esta mentalidad “científica” de finales del siglo XX y principios del XXI mi fe es puesta a prueba a cada momento demostrando en la mayoría de los casos que es mejor estar claro que tener esperanza pues siempre termina sucediendo cualquier cosa menos lo que pides en tus oraciones, ahí ya perdí el examen. Del punto dos y el tres no me voy a extender, no es raro que en medio de alguna bronca uno jure por dios que va a hacer alguna cosa terrible que de todas maneras nunca harás bien por no tener madera de criminal o simplemente porque nunca se den las condiciones, ahí ya valiste madres, juraste en vano, el pun tres; a menos que bañarse con cerveza aplique como alguna suerte de bautismo o tirar un poco del licor de cada botella recién destapada a la tierra para compartir con mis muertos  aplique como forma de santificar una fiesta, me es complicado pensar asuntos religiosos en ninguna parranda en forma, otro punto menos en mi lista.

Todos tenemos algún conflicto con nuestros padres, personalmente hay una historia ahí bastante personal que da para escribir un par de libros donde puedo explicar cómo sobreviví a mi infancia así que acepto la cualidad humana de mis padres, por tanto, sé que son falibles, aunque los respete no quiere decir que los obedezca para eso hace falta el ejemplo y el de ellos no aplica. Por supuesto NO mataré a menos que me vea forzado, ¿cómo es eso de que por ser buen cristiano debo dejarme matar por otro?, pero el documento no deja excepciones, solo espero no tener que verme en esa situación, aunque siendo sincero ya tengo una larga lista de posibles (e imaginarios) escenarios donde hay un paredón en el que pondría a una larga fila de personas nocivas para el planeta. Imagino que eso de no cometerás actos impuros sustituye a la fornicación como pecado, si hablamos del sexo consensuado sin fines reproductivos ya me gané la quinta paila del infierno donde seguro me encontraré a mucha gente conocida lo que no es tan dramático después de todo, no robo así que ahí estoy libre de pecado, pero escribo ficción y eso aplica como mentir, con respecto a la vida diaria hace años practico la ironía platónica y no miento aun cuando debería, solo busco el modo adecuado de decir la verdad del modo menos ofensivo posible, tampoco codicio bienes ajenos, aunque no sé si ver con gula las camionetas que tienen algunos de los conductores caraqueños, los apartamentos en el este de la ciudad, las casas de campo, las mansiones de algunas urbanizaciones aplique como envidia o todas esas cosas que alguna vez tuve y ahora están fuera de mi alcance apliquen también, en todo caso aunque solo quiero ganarme lo que tenga hay veces en las que los sueños lo traicionan a uno, sin embargo no está dirigido a (casi) nadie en particular pues sé que a pesar de los oropeles todo el mundo tiene un drama a cuestas y con los propios tengo más que suficiente para ganarme otros por puro envidioso.

Pensando acá, este lunes por la mañana, en que ¿si no hay nadie más poderoso que dios, entonces sus leyes están por encima de todo lo demás?, según todos los que pregunté me han dicho que si (los que no me respondieron solo con miradas de odio como las señoras testigos de jehová que reparten revistas en la esquina) solo que sus tribunales y los castigos se dan en aquellos juicios son cuando uno ya está muerto, donde además nadie vuelve ni da testimonio, no sabemos en realidad como termina el asunto con el castigo a los infractores, que según mis cuentas son al menos el 98% de los humanos. Ahora bien, hay otro precepto que dice que lo que no está sancionado por la ley debe estar permitido siempre y cuando no existan daños a terceros ni impulsen a cometer delito alguno, según esto por lo único que no puedo ser castigado en el infierno es por la razón que podría ir preso en mi país o en el mejor de los casos socialmente censurado, en ninguna de las versiones de los mandamientos dice que no te drogaras ni tomaras licor, dos cosas que hacen todos (al menos lo de las drogas) con receta o sin ella, el café no es agüita perfumada, ni el cigarrillo, ni la pastilla para los nervios ni la de dormir son caramelos, es más , son tan adictivas como la cocaína pero las receta el doctor.

Según esto el sitio más divertido no debe ser el infierno, debe existir alguna sala en el cielo donde uno se encuentre con todos esos genios que se drogaban y bebían para exultar a sus musas, que no le hicieron daño a nadie ni fueron detenidos por drogadictos (algo normal dentro de la hipocresía humana), a pesar de todos mis pecados espero terminar en el cielo conociendo a Bukowsky, García Márquez y a la muy larga lista de drogadictos y alcohólicos venerables, por suerte beber ni drogarse están prohibidos por los mandamientos y para mis pecados que tampoco son tan graves siempre habrá la posibilidad del arrepentimiento, espero que cuando me toque esté esperando san Pedro y no Kukulcan, ahí preferiré devolverme y comenzar a aterrorizar humanos, es más divertido que la otra expectativa, en caso de equivocarme, total todos comenzamos a morir desde el momento en que nacemos.

José Briceño

02/12/2024