Quizás este articulo sea el más polémico que he escrito, sin
embargo creo que es mi deber explicar a mis lectores y amigos algunas decisiones
que he tomado, en virtud de que en todas las ultimas elecciones he votado,
defendido ese derecho, aupado a todos los que conozco y a los que no, por todas
las vías posibles, sin embargo no hemos ganado ninguna de las elecciones desde
que por un misterio divino y a la vez profano los señorones del ahora PSUV
decidieron hacer todo de manera digital.
Como buen ciudadano digital, eso de votar de manera electrónica
me da un cierto prurito pues todos sabemos que ningún sistema es inviolable y
con estos tipos como garantes de esa inviolabilidad, las elecciones y sus
procesos parecen una fiesta de zamuros en un operativo mercal. Es en las últimas
elecciones, las presidenciales cuando se destapa o mejor, cuando la oposición obtiene
pruebas de un fraude descomunal y lo más seguro es que dicho fraude haya sido
continuado desde las primeras elecciones, no dudo que cuando ganaron la primera
vez todo halla sido de la manera más legal posible, sin embargo y a la vista de
los acontecimientos creo que hemos sido burlados de manera mayúscula desde hace
unos cuantos años, no solo la oposición, también los oficialistas ya que cuando
un triunfo es de dudosa procedencia pierde su gloria y me niego a creer que
todos los chavistas son una manga de irresponsables y tramposos.
No tengo la menor duda que entre las filas oficialistas
tengan personajes de probada moral, pero sus líderes son tan confiables como
las celestinas pobres cuyo amor y
fidelidad llega hasta que aparece un mejor postor y las petrocuentas son un botín
nada despreciable, en fin, la gran burla que hasta documentada está, denunciada
en los organismos internacionales, con pruebas más que contundentes, como por
ejemplo las mesas electorales ubicadas en las entradas del cielo y las del
infierno pues los muertos votaron, mesas donde sospechosamente no hubo ni un
voto opositor, gente con múltiples cedulas que votaron varias veces, votos
guiados, gente que tiene años desentendida del asunto electoral aparece votando
en sus centros originarios, el problema es que para la fecha esas personas
estaban a miles de kilómetros del país, ancianos de 150 años que también votaron,
multitud de superman, batman, patria socialista, disneylandias, y hasta
batichicas aparecen como votantes, en fin un largo etcétera de irregularidades
que apuntan a un nada confiable proceso electoral.
Para colmo han sido impugnadas esas ultimas elecciones y al
parecer los responsables, en vista de la escasez de papel higiénico usaron esos
expedientes para paliar su falta en los baños de esos institutos. Como ir a
votar en esa condiciones, como creer que los bandidos de franelita y boina van
a respetar los resultados, discúlpenme pero yo no creo que eso sea posible, muy
al contrario si no se ponen pilas los dos bandos serán igualmente estafados y
si nos dejamos volver a estafar somos el pueblo más pendejo del mundo.
Tanta paja que hablamos de la inteligencia del venezolano,
de sus ganas de trabajar por el avance del país , de lo maravillosos que somos
como pueblo, de lo valientes que fueron en el siglo XIX donde vencen al invasor
español y ahora nos lo tienen metido hasta la garganta pero igual sonreímos,
somos machotes por las redes pero en las calles nada, se burlan de nosotros,
nos quitan hasta el derecho de opinar pero igual “el tiempo de dios es perfecto”,
tengo años escuchando que ya van a salir de estos tipos, que nada con tanta
torpeza puede seguir, pero igual cada vez los siento más fuertes, más apoyados
por su caterva de gorilas, hoy mismo, mi novia me contó que vio a un motorizado
con toda la estampa de boleta de captura que tenía una franela que anunciaba “frente
de motorizados Iris Varela” , eso señores es un aviso de hacia dónde vamos.
Hasta que no se den las garantías necesarias para que
tengamos un sistema electoral realmente confiable no voto, es más hasta que no
tengamos un real peo que levante ronchas y por lo menos se cuenten el 100% de
las boletas y se contrasten con los cuadernos, no voto un carajo.
Seguro habrán algunos
insultos para mi posición pero igual me importa un carajo, siento que debo
gritar mi inconformidad pues de otra igual se van a limpiar el orto con los
verdaderos resultados y volverán a ganar los de siempre, seguro ganará la alcaldía
de mi ciudad un maracucho recién llegado, tal y como un gocho ganó la
gobernación de mi estado sin haber vivido jamás acá, los oficialistas estúpidos
lo aplaudirán, perdón, ¿dije estúpidos?, si coño, dije estúpidos pues si
celebran el quebrantamiento de las leyes después no vayan a llorar cuando en algún
momento le apliquen la misma y ellos hagan uso de proverbial capacidad de
hacerse las victimas siempre.
Ojalá no caiga en saco roto lo que digo, espero con ganas
que alguien escuche y comparta mi real indignación, si no voy a votar no es por
falta de patriotismo o de animo democrático, es que ya me harté de seguir
siendo un títere de los mandamases, eso de votar y perder el voto es como esposa de uno se acueste con los panas y de
todas maneras uno siga ahí, a su lado pidiendo las migajas mientras otro se
come el lomito y de paso pretenden que uno lo reciba con agrado y hasta les
prepare el trago y lo siento hasta allá no llega mi modernismo.
José Ramón Briceño Diwan,2013
@jbdiwancomeback
Totalmente acertada tu opinion y nada mas lamentable, pero real! lástima que en este pais, ya no se puede confiar en nada! La corrupcion en este pais lo acabó todo!
ResponderBorrarExcelente y acertada su reflexión la cual comparto al ciento por ciento.
ResponderBorrarEl voto, en estas condicones, no puede seguir convertido en arma de chantaje y manipulación. No se trata de abandonar los "espacios" se trata de defender los principios sobre los cuales podremos construir esos "espacios".
Este voto "sucio" ha servido solo para maquillar al régimen frente al mundo y éste se acomoda a los interese específicos de cada país, poco les importa Venezuela. Ellos tienen papel higiénico.
Hay personas que buscan justificar su decisión de no ir a votar llevando su excusa al plano personal; a su zona de confort. Jamás he dejado de votar y, detesto las excusas, pero esta vez no solo NO iré a VOTAR, y no necesito excusas, sino que hay sobradas razones para no hacerlo y, trataré de convencer a los de mi entorno para que no lo hagan. Haré el trabajo a la inversa. Por qué? porque me harte! no hay derecho para que a Maduro se le diga Ilegitimo que de hecho lo es, pero, es quien nos gobierna. Y? No pasó nada! Estoy en total acuerdo con tu reflexión, Briceño. Saben qué? NO tengo papel!!
ResponderBorrarEn defintiva, Venezuela no tiene dolientes
ResponderBorrar