jueves, mayo 09, 2013

Maduro el Rockstar, de gira por Mercosur



La verdad los militares nunca me agradaron, siempre los sentí tan engreídos detrás de los uniformes y las balas, tan creídos que se las saben todas más una cuando la realidad es que fuera del cuartel no son nada, su cultura (los de ahora cuando menos) no está más allá de los gritos y el mal gusto tan común entre todos los que hacen vida castrense. Claro ellos no tienen más escapatoria que aprender a no pensar pues de otra serian gente realmente útil y entre los cuarteles la gente inteligente no sirve para mucho pues cuestionarían las órdenes y eso no se hace.
Desde hace catorce años venimos sufriendo la locura militarista, por alguna maldición que deben habernos lanzado los españoles en tiempos de la colonia, hemos sido víctimas de la fiebre militarista en los últimos dos siglos, primero en el XIX cuando mi país ardió por los cuatro costados durante un siglo entero, desde la guerra de independencia hasta la última que se llamó Revolución Restauradora, esa nos dejó un general durante casi treinta años en el poder, el llamado benemérito Juan Vicente Gómez, muerto ese general no tardó mucho otro en hacerse con el poder , pero por diez años, ese se llamaba Marcos Pérez Jiménez, quien un buen día huyó hacia España donde Franco, otro dictador, lo recibió con los brazos abiertos, el ultimo militar que se hizo con el poder duró trece años, acaballado entre la muerte del siglo XX y el nacimiento del nuevo siglo que recién comienza, a ese no lo tumbó nadie pero un cáncer se lo llevó.
En ese punto quizás uno diría que por fin el cáncer hizo algo amable por la humanidad pues nos evitó el incordio de aguantarnos al hombre cuanto le diera la gana, pues con los poderes del estado parcializados y arrodillados ante su voluntad es complicado que no hubiese fraude, sin embargo antes de morir dejó a un heredero, como si la presidencia fuese un trono que se hereda, de paso los tipos desde el gobierno se hicieron los locos y se inventaron una tal presidencia encargada, pues el presidente de la Asamblea Nacional quien es el llamado a suplir al de la nación cuando hay falta absoluta no era el señalado por el difunto.
Si los militares son nocivos como casi todas las naciones de este continente que han sufrido sus gobiernos sabe, perores son los que sin serlo se lo creen y Maduro es de esos que se creen militares pues a la primera hasta se disfrazan de uno, pero manteniendo el decoro de no decorar su disfraz no vaya a ser que los venezolanos terminen de perderle el poquito respeto que le profesan, sobre todo después de descubrirse con pruebas irrefutables lo de la elección a todas luces irregular por no decir que fraudulenta.
En fin, el hombre se hizo con el poder y junto con el toda la camarilla de viejos y de nuevos “Revolucionarios” ávidos de poder y de riquezas, esta semana se fue de gira por los países de Mercosur, ayer estuvo en Uruguay donde se alojó en un hotel de cinco estrellas como corresponde a un mandatario, el problema no es el hotel, es la comitiva que según he leído por allí es de más de 200 personas incluido un cheff personal y quien sabe cuántos lujos más , aparte, como si fuese poco, el hombre alquila tres pisos del hotel, no sé cuánto será eso pero seguramente serán más de 150.000 dólares la noche, sin incluir los gastos de hotel, transporte, viáticos para tal batallón de personas que lo acompañan  y eso no lo paga el, eso lo pagamos todos con los impuestos que deberían ser para otras cosas.
Mientras el tipo anda creyéndose un rockstar con comitiva y groupies incluidos, acá estamos viviendo una de las crisis más complicadas que recuerdo, el sistema eléctrico dañado y los apagones son cosa de todos los días en todas partes, los hospitales públicos parecen funcionar en un frente de batalla, no hay ni camas y los pacientes que no tienen dinero o familiares que los ayuden sobreviven por la mística y laboriosidad de quienes allí laboran, los docentes ganan sueldos de menestral como si los títulos universitarios los regalan con cajas de cereal, las escuelas, liceos y universidades están en condiciones deplorables, los alimentos básicos de la dieta del Venezolano promedio, o no se encuentran o están tan caros que hacer un mercado con todas las de la ley está solamente en los sueños de la mayoría.
Además como si fuese poco la escasez ya dejó los supermercados para instalarse en farmacias, tiendas de repuestos -de todos los rubros que se pueda imaginar señor (a) lector (a) -  alimentos de animales, carnicerías, zapaterías, aparatos electrónicos y hasta insumos para equipos médicos. Sin dejar de mencionar el control de cambio el cual limita la compra de divisas a lo que el estado tenga a bien venderte y en el caso de querer más pues dirigirse al mercado negro donde un dólar cuesta casi cuatro veces más que el oficial.
Todo esto sucede mientras el presidente que debería hablar con el ejemplo se da vida de rico y famoso, regalando petróleo y plata a sus amigos del extranjero, haciendo una grosera demostración de malversación de fondos pues una comitiva de diez personas vale pero 200  es una monstruosidad que raya en la locura. Seguro alguno me leerá y me dirá que los presidentes deben viajar según el estatus que le corresponde como primer mandatario de un país, pero sinceramente pónganse la mano en el corazón y díganme si con todo lo que está pasando en su tierra un presidente consiente viaja con tal derroche, mientras el pueblo pasa las de Caín.
Amanecerá y veremos, mientras no nos queda más que apretar los dientes, afilar el discurso y apoyar todas las muestras de disidencia que ya se dan en el país, claro rogando no pasar de ser un ciudadano más pues en el momento que eso sucede ya te vuelves sujeto sospechoso y con mucha suerte se logra escapar pues si no es así, de la cárcel no te salva ni el papa mismo, las muestras están en los presos políticos que tiene el gobierno.
Seguramente usted querido lector(a) que se toma la molestia de averiguar en google sobre mi país, que quizás mira telesur y que de alguna manera admira los adelantos de la izquierda venezolana, lo invito a venirse unos días, quizás hasta le de alojamiento por un rato, claro, usted paga los gastos pues esto de pasear con mi sueldo de profesor no se puede a menos que le guste caminar y comer en casa, para que vea lo que en realidad pasa, es más, le puedo presentar algunos médicos que trabajan para el sistema público, además de muchos de mis amigos y colegas que han sido víctimas del hampa, claro, le recomiendo que se apure pues casi todos esos amigos y colegas se han ido del país huyendo de todo esto y hasta yo estoy pensando muy seriamente hacerlo, por tanto es una oferta bastante limitada, para que descubra que en mi país estamos a niveles africanos, no por culpa de la derecha si no por la izquierda que ha hecho del erario nacional su bolsa privada mientras que los otros estamos soñando con tener un solo día de los viáticos que le pagan al más “humilde” de los miembros de la comitiva del Rockstar que tenemos por presidente.
José Ramón Briceño. 2013
@jbdiwancomeback


1 comentario:

  1. Amigo, son unas pequeñas vacaciones de entrada a la presidencia por vìa fraudulenta, còmo será si no lo paramos de una..? son tres dìas de estadía con los chulos y barraganas (me atrevo a decirlo), más de uno a de andar con la amante de turno.. Y tienes razòn, poco le falta para colgarse de galones en la pechera y solapa. Debería ponerse una medalla por cada asalto a la nación... Confío en que lo de irte se quede sólo en en el mal momento, esto esta en caída libre.. el tobogan está aceitado por él mismo. Y, que nadie te tome la palabra en eso del tour por Venezuela, sería todo un riesgo y, tu concienca ha de estar fresca para que sigas escribiendo con esa pluma filada. Feliz tarde, buenisimo! Dios te bendiga.
    GladysdlPilar...
    ,)

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